Hay quienes lo perciben como una amenaza para la industria, otros como la oportunidad de evolucionar, lo cierto es que todas las miradas están en este fenómeno mundial.

Ana Rechy

El mundo está en pausa, pero la industria del entretenimiento, no. Cada vez son más las empresas de esta industria que apuestan por migrar su contenido en línea. Todos quieren una rebanada del pastel del streaming y hoy te vamos a contar un poco más.

Por lo anterior, los sistemas de cable, que lideraron este sector por tantos años, han visto afectado su reinado a partir de la llegada del contenido on demand, y es que para el usuario resulta muy conveniente ver lo que quiere, cuando quiere.

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Streaming, ¿quién fue el primero?

De acuerdo con el portal Market Realist todo comenzó con Netflix en 2005, esta compañía rápidamente se extendió por el mundo cambiando los hábitos de consumo en música, documentales, videojuegos, series, así como conciertos.

Control de televisión
Control de televisión. Cortesía Canva.

Por lo que, con tal de sobrevivir ante esta amenaza, los grandes del entretenimiento han tenido que adaptar sus estrategias para satisfacer las necesidades de un cliente que sabe lo que no quiere: contenido único y en horarios fijos.

En consecuencia, empresas como Disney y Televisa, lanzaron sus propias plataformas, HBO y Dish formaron alianzas con los gigantes Netflix y Amazon para ingresar al mercado.

La realidad es que la diversificación abrió más posibilidades para que nuevos rostros de actores y productores brillen y finalmente, nuevas historias con tramas creativas vean la luz. No te pierdas estas series de Netflix que te recomienda el equipo de Zarzuela Comunicación.

Televisor antiguo
Televisor antiguo. Cortesía Canva.

La tendencia

Entre los beneficios del streaming está el combate más intenso contra la piratería. Los tiempos de los lanzamientos en las diferentes plataformas se han acortado y solo un par de meses los separan de los estrenos en cine.

Ahora, con la llegada de la pandemia y el cierre de los cines, Disney Plus probó una nueva forma de presentar al público su contenido por primera vez. Así fue como Hamilton llegó a las pantallas de los suscriptores del sistema.

De la misma forma, probarán suerte con Mulán, pero esta vez adicional a la tarifa mensual los consumidores tendrán que pagar una cuota extra para poder tener acceso a la cinta. Si esto funciona, ¿será el fin de los cines? En Zarzuela Comunicación nos gusta seguir la evolución de distintos sectores si te interesa conocer más visita nuestro blog.